LAS 9 COSAS QUE NADIE TE CUENTA DE SER MAMÁ

Ser mamá se vuelve una de las mejores aventuras a las que puedes adentrarte...


 

...ya sea por decisión o por “calentura” algo tienes por seguro: tu vida y tus días no volverán a ser los mismos. Y no hablo sobre cómo “no volverás a dormir” si no sobre lo que nadie te dice sobre ser mamá y que a mi en particular me pasó y me pasa.

Nueve puntos que nadie te cuenta sobre ser mamá:
  1. Viajar sola no será lo mismo. De repente trepada en el avión, coche o barco te topas con la fantasía de culpabilidad de qué haría tu hijo si tú no regresas a él.
  2. Te vuelves bipolar. Sí, como se escucha, tienes momentos en donde no toleras un llanto más, una pregunta más o un “mamá” más, pero de repente, en el momento en el que dejas de escucharlo, eres tú la que lo llama, la que lo busca o extraña.
  3. Comer caliente se volverá un lujo.
  4. Te vas a equivocar. Hagas lo que hagas, leas lo que leas, estudies lo que estudies, tu hijo va a crecer traumado, lo vas a lastimar y definitivamente te va a culpar de todos sus malestares.
  5. Temerás su adolescencia. Así como disfrutaste la tuya y el recuerdo de lo increíble que fueron las fiestas, las salidas, escapadas y demás, temes el día que te encuentres con tu hijo adolescente y haga lo mismo que hiciste tú o peor y cómo reaccionarás o cómo lo detendrás.
  6. No pasa nada si no das leche materna. Siempre tendrás a la mamá, tía, abuela o amiga que te verá como la peor si no das leche, adivina qué, si no te baja la leche o simplemente tuviste que dejar a tu hijo en la guardería a los 2 meses, él no va a estar ni más traumado, ni desnutrido por no darle de tu leche.
  7. Desearás cargar con tapones de oídos. Ya sea porque todos opinarán sobre cómo puedes ser una mejor mamá: “Tu hijo te manipula”, “que mal come”, “es un berrinchudo”, “pero qué inquieto”, etc, etc. o estarás en momentos en donde parece competencia del hijo pródigo.
  8. Tus ingresos dejarán de ser tuyos. Cuando te sobre dinero ya no será para gastártelo en ti, nada te dará más gusto que gastarlo con tu hijo o en tu hijo.
  9. Trabajar y ser mamá no te vuelven mala madre. Tendrás que tener claro que todo el mundo hablará y juzgará sobre cómo ser mamá, pero nadie en absoluto sabrá mejor cómo serlo para tu hijo mejor que tú y, si dentro de tus posibilidades o planes esta el no dejar de trabajar, no te culpes y por nada del mundo eduques a tu hijo con culpa por no estar con él. Nada está escrito en piedra, siempre te puedes arrepentir. 

"Ningún amor es más grande que el de una madre por su hijo" - Dan Brown.

Pilar Abascal. 
pabascal@f3corporativo.com 
Twitter: @F3Servicios

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